AL BORDE DEL PELIGRO (1950)

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AL BORDE DEL PELIGRO

«Al Borde del Peligro«. Dirigido por Otto Preminger
Producido por Otto Preminger
Guion por Ben Hecht
Historia de Víctor Trivas Frank P. Rosenberg Robert E. Kent
Basado en Night Cry de William L. Stuart
Música por Cyril Mockridge
Cinematografía Joseph LaShelle
Editado por Louis Loeffler
Proceso de color En blanco y negro
Empresa de producción 20th Century Fox
Distribuido por 20th Century Fox
Fecha de lanzamiento: Agosto de 1950
Tiempo de ejecución 95 minutos
País Estados Unidos
Idioma inglés
Presupuesto $ 1,475,000
Taquillas $ 1 millón

Sinopsis

«Al borde del peligro» es una película de cine negro estadounidense de 1950 dirigido y producido por Otto Preminger. El guion de la película fue escrito por Ben Hecht y adaptado por Robert E. Kent, Frank P. Rosenberg y Victor Trivas . El guion y las adaptaciones se basaron en la novela Night Cry de William L. Stuart. La película está protagonizada por Dana Andrews y Gene Tierney.

La narrativa de la película se refiere al despiadado y cínico Mark Dixon (Dana Andrews), un detective de la policía metropolitana, que desprecia a todos los criminales porque su padre era uno. Considerada un clásico del género del cine negro, la película muestra un tipo de violencia, «acechando debajo de la sociedad urbana«, que es un importante motivo noir.

Trama

En un juego de dados flotantes en la ciudad de Nueva York dirigido por el gángster Tommy Scalisi (Gary Merrill), la hermosa Morgan Taylor (Gene Tierney) decide irse por la noche, y el magnate de Texas Morrison (Harry von Zell) se ofrece a acompañarla a casa. Scalisi está claramente molesto, ya que Morrison ha subido $ 19,000 en este momento.

Morrison simplemente dice que está en la ciudad toda la semana y «lo recuperarás otra noche«, pero el socio de Scalisi, Ken Paine (Craig Stevens), le dice a Morgan que tiene que quedarse. Ella se da cuenta de que él solo la trajo al juego para que Morrison la siguiera, y ahora está decidida a irse.

Paine abofetea a Morgan, con lo cual Morrison comienza una pelea a puñetazos con Paine. Morrison queda inconsciente, pero cuando llega la policía lo matan a puñaladas.

Uno de los detectives de la policía es Mark Dixon (Dana Andrews), que acaba de ser degradado por su uso intensivo de la violencia. Odia a los criminales porque su padre era uno. Hace dos años arrestó a Scalisi por asesinato, pero Scalisi fue absuelto.

Scalisi dice varias mentiras sobre el crimen e implica a Paine. Dixon va al apartamento de Paine y lo interroga, pero Paine se enoja y pelean brevemente. Pero, sin que Dixon lo sepa, una herida de guerra ha dejado a Paine con una placa de metal en el cráneo. Cuando cae, se golpea la cabeza y muere.

Después de su reciente reprimenda, Dixon no se atreve a informar de lo sucedido. Tomando prestado el abrigo de Paine y poniéndose un vendaje donde Paine tenía uno, deja un rastro falso que sugiere que Paine se ha ido de la ciudad. De vuelta en el apartamento de Paine, casi lo ve el padre de Morgan, el taxista Jiggs Taylor (Tom Tully), quien llega y amenaza ruidosamente a Paine, luego se va cuando no hay respuesta. Dixon luego toma el cuerpo y lo arroja al río. Pronto se encuentra, pero sugiere que Scalisi asesinó a Paine y a Morrison.

A medida que avanza el caso, los detectives hablan con Morgan y Jiggs Taylor. Morgan es la esposa separada de Paine; la noche del asesinato es la única vez que lo ve en meses. Ella y Dixon comienzan a enamorarse. Pero, aunque Dixon insiste en que Scalisi es el asesino, Jiggs fue visto en el apartamento de Paine y fue arrestado. Dixon no puede soportar decirle a Morgan la verdad, pero se las arregla para pagarle a un abogado de primer nivel para Jiggs, uno que nunca ha perdido un caso de asesinato; sin embargo, el abogado rechaza el caso, ya que cree que perdería este.

Después de una confrontación infructuosa con Scalisi, Dixon escribe una confesión, dirigiendo el sobre al inspector Foley (Robert F. Simon) y marcándolo «para ser abierto en caso de mi muerte«. Luego se dispone a reunirse con Scalisi de nuevo, esperando ser asesinado, pero razonando que esta vez Scalisi será capturado por ello; pero Scalisi también lo anticipó y se dio cuenta de lo que le sucedió a Paine.

Se niega a matar a Dixon. Luego, uno de los hombres de Scalisi llega con la noticia de que la policía le ha sacado la verdad sobre Morrison a otro pandillero. Mientras la pandilla intenta escapar en un elevador de automóviles , Dixon logra retrasarlos deteniéndolo hasta que llegue la policía.

De vuelta en el distrito 16, Foley le ofrece a Dixon la carta sin abrir, pero Dixon le dice que la lea. Foley arresta a Dixon. Morgan pregunta por qué y Dixon le pide a Foley que le muestre la carta. Sabiendo la verdad, ella todavía lo ama y declara con confianza que no será castigado por la muerte accidental.

Elenco

Dana Andrews como el sargento detective. Mark Dixon
Gene Tierney como Morgan Taylor-Paine
Gary Merrill como Tommy Scalisi
Bert Freed como el sargento detective. Paul Klein (socio de Dixon)
Tom Tully como Jiggs Taylor, el padre de Morgan.
Karl Malden como el detective teniente Thomas
Ruth Donnelly como Martha, dueña de Martha’s Cafe
Craig Stevens como Kenneth Paine

Antecedentes

«Al borde del peligro» es la última película que Otto Preminger haría como director contratado para Twentieth Century Fox en la década de 1940. La serie incluye Laura , que también está protagonizada por Gene Tierney y Dana Andrews, Wirpool , y el Angel Caído .

Lugares de rodaje

La película se rodó principalmente en un set de estudio, pero los realizadores también rodaron algunas escenas en lugares reales de la ciudad de Nueva York .

Recepción
Respuesta crítica

La mayoría de los críticos comparan la película desfavorablemente con la película anterior de Preminger, Laura, que utilizó gran parte del mismo talento que esta película. Según los escritores de cine, esta película, un noir más valiente, logra mostrar un lado más oscuro de la policía similar al cine negro que le sigue.

El crítico de cine del New York Times , Bosley Crowther , aunque pensaba que el guión era demasiado inverosímil, le gustó la forma en que estaba escrito el diálogo y también la actuación. Escribió: «… la verosimilitud del guión de Ben Hecht, un veterano de las estaciones de radio y los sórdidos inframundos, es cuestionable en varios aspectos. Sin embargo, no es así, su diálogo mordaz y el desarrollo de la trama, que Otto Preminger, quien guió a las mismas estrellas a través de Laura hace varias temporadas, se ha vuelto como un pato en el agua y siguió avanzando con precisión hasta el desvanecimiento «.

El personal de la revista Variety elogió la dirección de la película. Escribieron: «Otto Preminger, director, hace un excelente trabajo al marcar el ritmo de la historia y generar simpatía por Andrews«. Harrison’s Reports calificó la película como «uno de los melodramas criminales más tensos y absorbentes producidos en muchas lunas«, con un diálogo «excepcionalmente bueno«. John McCarten de The New Yorker , sin embargo, solo lo consideró «un melodrama de regular a medio«.

Análisis negro

Según Boris Trbic, guionista e instructor de medios, «Al Borde del Peligro» refleja una fase específica en el desarrollo del estilo del cine negro. Las grandes productoras cinematográficas de principios de la década de 1950 se alejaron del drama de problemas sociales y en su lugar hicieron «thrillers de bajo presupuesto y bajo riesgo» como: Panic in the Streets , No Way Out , esta película y otras. Como tal, evitaron la «ira de los críticos conservadores y los perros guardianes sociales«.

Preservación

El Archivo de Cine de la Academia conservó Where the Sidewalk Ends en 2004.

Reseña de Craig Butler

«Al Borde del Peligro«, aunque apenas es oscuro, tampoco es tan conocido como merece. Esta entrada de cine negro es decididamente defectuosa, lo que evita que esté en el rango superior absoluto, pero es tremendamente buena, especialmente para los aficionados a los thrillers policiales. El principal defecto es que la configuración de su historia básica no parece del todo creíble; Parece exagerado que Dixon hiciera todo lo posible para encubrir el asesinato que comete accidentalmente.

Ciertamente, hay personas que harían esto, pero no suena del todo cierto con lo que sabemos del personaje. Peor aún, es increíble que Jiggs sea acusado del asesinato; no hay sangre en su taxi, sin embargo, el hombre asesinado seguramente habría dejado rastros allí si el hecho se hubiera hecho de la manera que sugiere la policía. Sin embargo, si uno puede aceptar algunos de los tramos de la trama, Sidewalk es un hilo tenso y totalmente apasionante que también logra hacer una buena y vieja exploración existencial de lo bueno y lo malo que coexisten en todos nosotros. (pero la mezcla en nuestro protagonista es más que suficiente para demostrar el punto de vista del guionista Ben Hecht ).

Hecht también ha proporcionado un gran diálogo y algunos papeles jugosos para sus actores, con la excepción del personaje de Gene Tierney, que es sorprendentemente soso. Afortunadamente, el aspecto estelar de Tierney hace que el aburrimiento del personaje sea secundario. Como Dixon, Dana Andrews se convierte en una de sus mejores actuaciones. La gama de personajes de Andrews era bastante limitada, pero demostró aquí y en varias otras entradas que era un héroe del noir perfecto: en conflicto, torturado y desgarrado, pero siempre con una apariencia de dureza.

El resto del elenco también es fuerte, incluso con Gary Merrill convirtiendo en una actuación digna de elogio. La dirección de Otto Preminger es excelente, llena de su cámara deslizante e inquisitiva que no dejará a los personajes solos y con un sentido experto del ritmo que mantiene la película a un ritmo agradable y tenso. Bruto y melancólico, Sidewalk es una pequeña joya.

Información cedida por Andrés CumsilleFanáticos del Cine Clásico
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